Este sendero, al igual que algunos de los proyectos que penden de la Senda, es una excusa.
Una excusa para curiosear, avanzar y profundizar en el conocimiento de los remedios naturales, las terapias alternativas, la historia de la medicina y la evolución de los métodos de sanación del ser humano.
Es una excusa para aprender.
Es una vía de apertura y reunión de proyectos relacionados con la fitoterapia, la aromaterapia, balneoterapia y todas esas terapias complementarias que un día fueron las únicas opciones de curación para algunos pueblos y hoy forman parte del abanico de opciones del mundo moderno.
Dentro del amplio catálogo de terapias naturales se engloban algunas de efectividad y base dudosa, no soy yo quién para señalarlas, pero por su presencia en el mismo saco denostan la potencia y buena labor de otras que sí están respaldadas por lo que entendemos hoy por ciencia, respaldadas por evidencia evolutiva y por el empirismo de su uso.
En este segundo grupo se centra este sendero y sobre ellas iremos ampliando información y curiosidades.
Tienen cabida en el Sendero de la Salud Natural los llamados ahora “súper-alimentos” y todo el uso de hierbas que ha servido de base a la farmacología tradicional y moderna; también los aceites esenciales y su uso, ya sea en aromaterapia o cosmética natural; tienen cabida también las técnicas manuales (fisioterapia, osteopatía, reflexología, drenaje linfático, quiromasaje…) y las técnicas de spa (balneoterapia, fangoterapia…).
¿Y tú?
¿Qué opinas de las terapias naturales?
Fundadora de la Senda de la Naturaleza y proyectos asociados. Mi pasión es ayudar a impulsar proyectos artísticos y sueños complejos.
