Hoy tenemos el placer de presentar un nuevo fichaje en la Senda:
Nesa Vira, facilitadora de procesos de descubrimiento interior para mujeres.
Vanessa tiene un proyecto fascinante dedicado a la libertad femenina y al autodescubrimient a través de la danza y las palabras.
Deja que ella misma te lo cuente y enamórate del espíritu de luna que irradia esta mujer extraordinaria…
A través de una amiga me llegó hace varios años una información sobre el significado dado a las distintas luna del año. Siempre he estado fascinada por la luna, sobre todo en su sentido simbólico. Quizás fuera por eso que desde que conocí ese documento, lo he tomado como guía que seguir cada mes hacia mi desarrollo interior.
Lo que descubrí en ese momento es lo que se conoce en algunas tradiciones como «Rueda Lunar del año». Es una especie de guía, de calendario, en el que se relaciona la luna llena de cada mes con lo que está ocurriendo en ese momento en la naturaleza, con los cambios que en ella se van dando con el pasar de las estaciones. De esta forma, a medida que pasamos por cada una de las lunas del año, recorremos las estaciones, los equinoccios, los solsticios y, con ellos, el ciclo continuo de creación y recreación de la vida.
En el momento que descubrí esta información, sentí que los mismos cambios que señalaban cada una de las lunas en la naturaleza, se daban también de mí. Desde entonces esta guía lunar me ha acompañado en mi desarrollo interior mostrándome cada vez aspectos distintos de mí misma.
La rueda que conocí en su día parece estar pasada en antiguas tradiciones europeas. Las pocas referencias que he encontrado la sitúa en la tradición celta. Con el tiempo he ido conociendo otras ruedas procedentes de distintas tradiciones. A mi entender y a mi sentir, el origen de cada una de ellas es femenino, como casi todo lo que tiene que ver con la luna, y como tal muestra los misterios de la vida en su continua creación y recreación.
Desde que conocí este ciclo hace ya años, ciclo-espiral que no acaba nunca, lo sigo como mapa que me ayuda a continuar descubriéndome y recreándome, como una guía que me lleva a conectar con lo más profundo de mí misma y a recuperar en cada luna aspectos olvidados o perdidos de mi interior. El ciclo es en realidad una espiral porque cada vez que pasamos por uno de estos aspectos estamos en otro lado. Nunca se pasa dos veces por el mismo lugar si realmente hemos interiorizado algo de él.
Tanto me ha servido a mí y me sigue sirviendo, tanto ha servido y ha fascinado a las mujeres con las que lo he compartido a lo largo de estos años, que he preparado una guía para tenerla siempre como referencia.
Esta entrada es una brevísima descripción de los contenidos de la guía. En ella encontrarás, junto al sentido que tienen las lunas en la rueda del año, algunos aspectos a trabajar de la vida de cada una. La elección está basada en la relación que encuentro entre lo que la luna muestra de la tierra y aspectos que nos ocupan a las mujeres en el camino de descubrirnos internamente en todo lo que somos.
Cada luna y sus aspectos están presentadas en relación a lo que está sucediendo fuera en la naturaleza, al viaje de la luz desde su plenitud hasta su declibe, teniendo en cuenta que lo que sucede afuera, sucede de alguna forma dentro de cada cuerpo, en nuestro mundo interior, en nuestra psique y en nuestra alma.
¡Vamos allá!
LUNA DEL BIENESTAR
Así es como se llama a la luna del mes de enero. Es la época del año en la que el frío nos lleva a permanecer resguardadas. Por eso lo que te planteo aquí es la importancia de tener “un cuarto propio”, un lugar donde poder apartarte del mundo y atender a tus necesidades y deseos.
LUNA DE LA FORTALEZA
Este es el nombre de la luna del mes de febrero. Es un momento en el que las horas de luz van aumentando. A pesar de esto aún hay que tener cuidado porque pueden caer heladas. La presencia y la fortaleza interna son necesarias en este momento para atravesar estas situaciones difíciles. Lo que te propongo en esta luna es habitar tu propio cuerpo hasta llegar a tus propias raíces, el lugar de la fortaleza interna.
LUNA DE LA SEMILLA
Esta es la luna que corresponde al mes de marzo. Es la llegada de la primavera, el momento en el que dentro del ciclo de cultivo se seleccionan las semillas que queremos plantar. Las semillas hablan de los deseos, de aquello que queremos conseguir en la vida, ya sean cosas cotidianas como proyectos más existenciales.
LUNA DE LA SIEMBRA
La siembra llega en el mes de abril del hemisferio norte. Es un momento en el que la tierra se abre a ser cultivada y los primeros brotes de las plantas están saliendo. Esto lo relaciono con el momento de ponerse manos a la obra para hacer eso que una tiene que hacer en la vida para conseguir que los propios deseos se materialicen.
LUNA DE LAS FLORES
El mes de mayo es reconocido como el mes de las flores. Tal y como ellas hacen, la propuesta es trabajar sobre eso que hace que te muestres o no al mundo, que te muestres tal y como eres sin pretender encajar en ningún molde, siendo sencillamente tú misma. Es el momento de atender también a las palabras y a lo que decimos al mundo.
LUNA DE MIEL
Así es como llaman a la luna del mes de junio. Tradicionalmente es un mes relacionado con la fertilidad. Nosotras lo enfocaremos como un momento de redescubrir tu propio placer en toda su grandeza.
LUNA DE LAS BENDICIONES
El mes de julio, comenzado ya el verano, es un mes en el que los frutos son abundantes. Es un momento de recogida de alimentos a la vez que la tierra sigue generándolos. Nos centraremos en reconocer nuestra propia potencia creadora así como nuestras creaciones. Reconocerlas, valorarlas y disfrutarlas.
LUNA DE LAS HIERBAS
A la luna del mes de agosto se la conoce como luna de las hierbas. Es el primer mes de la cosecha, donde se empiezan a recoger alimentos que necesitaremos a lo largo del invierno. Lo primero a recoger son las hierbas, que conforman el botiquín. Entre ellas, hay que saber distinguir las que aportan algo de las que no. Este es un saber al que atenderemos en esta luna: el de reconocer lo que realmente me está aportando, me está ayudando, de lo que no para dejarlo ir.
LUNA DE LA COSECHA
El mes de septiembre es el mes de la cosecha. Aunque cada alimento tiene su tiempo de cosecha, en este mes se aglutina el trabajo de preparar los campos, recoger el cereal y hacer las conservas de las frutas y verduras del verano. Es un momento que podemos aprovechar para decidir qué se puede guardar y qué hay que soltar de cara a los meses de frío. Nosotras haremos lo mismo internamente.
LUNA DE LA SANGRE
Con el mes de octubre llega la luna llamada “de la sangre”. En el calendario celta era considerado el último mes del año de ahí que fuera entendido como un momento propicio para mirar atrás y agradecer todo lo recibido, no sólo durante este año, sino hacia atrás en la vida de cada una. Nosotras aprovecharemos este momento para reconocer el camino de las mujeres que anduvieron antes que nosotras y recoger su legado.
LUNA BLANCA
En el mes de noviembre las noches comienzan a ser más largas y más oscuras. Con el invierno cerca y el frío aumentando, en un tiempo donde no había luz eléctrica, cada vez pasábamos más tiempo en el interior de las casas. La propuesta en este momento será la de dirigir la mirada hacia dentro para verte por dentro con la ayuda de lo que otras mujeres dicen del mundo y de sí mismas.
LUNA SABIA
Después del viraje hacia dentro de la luna pasada, diciembre y su luna sabia se consideraba un tiempo en el que esperar el nacimiento de la luz en el solsticio de invierno. Es un momento para cuidar la poca energía disponible (horas de luz y calor) y atender bien a qué acciones hacer pues la vida dependía de ello. Nosotras nos centraremos en contactar con nuestro sentir más profundo para poder distinguir qué es lo realmente importante de lo que no.
LUNA AZUL
Se considera luna azul a la segunda luna llena que se da dentro del mismo mes del calendario. El año de 12 meses contiene 13 lunas. A veces sucede que un mes tiene dos lunas llenas. La segunda de ese mes, sea cual sea, es la llamada luna azul. Su característica es que potencia la energía de la luna a la que acompaña.
Si sientes que esta guía tiene algo para ti, puedes conseguir el documento completo en mi página web.
Acompaño a mujeres que quieren conectar con ellas mismas, vivir desde su centro y reconocerse en todo lo que son. Lo hacemos a través de la biodanza, la escritura y el pensamiento femenino, para quitarnos, una a una, las capas que ocultan nuestra grandeza.